El viernes pasado, tuve un evento de trabajo en las afueras de la ciudad. La cita fue a las 9:30am así que sugerí un desayuno rápido antes de llegar al evento! Seamos sinceros… quién se resiste a un buen desayuno?
El trayecto nos llevaba por la carretera a Ameca y trás hacer un recorrido mental del camino sugerí improvisar algo llegando a La Venta del Astillero, parecía el lugar ideal. Para aquellos que han circulado por ahí, saben que el cruce por Venta del Astilero, esta bordeado de puestos y restaurantes ofreciendo lo típico en “comida de carretera”. Burritos, Pollo Asado, Borrego y Carnitas. Nunca había comido ahí pero la sabiduría popular es fuerte y no debe de ser ignorada. Algo bueno habría, era cuestión de saberlo encontrar.
Sugerí que nos estacionáramos en la zona y camináramos hasta encontrar algo que se viera interesante. Elegir un lugar puede parecer trivial pero es, en realidad un gran compromiso. Una mala decisión puede terminar en la intoxicación de algún estómago débil y peor aún, la pedida absoluta de la confianza de la gente… algo que un blogger de comida, no se puede permitir. Para aumentar la presión, caminabamos en terreno inexplorado… nunca había comido por ahí… básicamente, lo único con lo que contaba, era mi experiencia y 6to sentido. Lo demás, era solamente una apuesta.
Se sugirieron un par de opciones, restaurantes al pie de la carretera, todos ofreciendo desayunos (huevos, chilaquiles, tortas…) pero algo no estaba bien… se respiraba intranquilidad en el grupo. Leyendo esto, decidí cambiar el rumbo de la expedición…. y dirigirme a terrenos más conocidos. Un puesto de calle.
Justo en la esquina de la calle donde nos estacionamos y la carretera, había dos puestos establecidos ( establecidos = mesas, sillas y un toldo). Unas señoras despachaban una gran, y rica variedad de tacos de olla: lengua, chorizo, rajas, champiñones, barbacoa, quesadillas… dí luz verde para que todos pidieran. La decisión había sido tomada y la moneda estaba en el aire.
El que hoy este escribiendo sobre esta experiencia, subraya el éxito del desayuno. Para ser justos, no fueron los mejores tacos que haya probado en mi vida… pero no se trataba de eso, se trataba de desayunar algo rico que no intoxicara a nadie. Era sobrevivir una experiencia cotidiana, no era el fin de la jornada, era tan sólo un paso. Los tacos estaban ricos, pero lo que realmente dejó huella, fue la quesadilla y la gordita (no la que desapachaba sino la que pedí con frijoles y queso).
La gordita estuvo fácil 10 minutos sobre la plancha, dorándose lentamente y transmitiendo el calor a través de la masa — los frijoles — hasta llegar al queso y lentamente fundirlo, sin quemar el exterior ! Acompañada de un poco de nopales y unas salsas… aunque en realidad no necesitaba nada ! DELICIOSA y sencilla… el tipo de comida que se pide en un puesto así.
La quesadilla era única, el ABUNDANTE queso aportaba la sal necesaria para agregar a cada mordida una experiencia. A diferencia de las tortillas de los tacos, esta era más gruesa, con más masa para proteger al queso y permitir que el calor lo fundiera, hasta llegar al punto perfecto . La quesadilla iba perfecto con un poco de frijoles, mismos que te podías servir a gusto. Las salsas y los nopales…. todo se orquestaba para que el plato fundamental del desayuno, fuera algo tan sencillo como una quesadilla.
Todo esto me dejó pensando en la importancia de saber elegir un buen puesto, y saber que pedir en el puesto. Las salsas, el comal, el menú, la caja, los refrescos, el ambiente, la gente, quién despacha… todo se convierte en factor clave a la hora de elegir un buen puesto. Una vez ubicado el puesto, se debe de saber que pedir ! Esto me da pie para un próximo post ¿Cómo elegir un buen puesto de calle y qué pedir en él? Obviamente tengo ya mis propias teorías pero no esta de más pedir sugerencias… cómo eligen ustedes sus puestos, dónde comen y dónde no? recordemos el buen Fugu ! jejeje Pero bueno… por lo pronto, hablando de este puesto en lo particular, no me daría la vuelta hasta Venta del Astillero para comer una quesadilla, pero tengan por seguro que si voy rumbo a Vallarta y tengo hambre. Pasaré por una Gordita antes de pararme a comer un Vikingo del Oxxo más cercano !
Saludos y Provecho !
Marcela M
ayyyy!! que ganas de una quesadilla “con queso” … me encantaría saber por qué los chilangos decidieron que las quesadillas no llevan queso??? alguna idea?
pfrulas
No tengo ni la más remota idea… pero hay unas Quesadillas-sin-Queso muy ricas también…
conclusión: si saben ricas, que les digan como quieran ! jajaja
Maria
Deliciosa tu opcion, estoy por ir a este lugar ahora que estemos en vacaciones navideñas, gracias por la sugerencia.
pfrulas
Una gordita de frijol con queso para la carretera ! mmm genial
El Arte de elegir un puesto para comer… 1 « Comida y Bebidas…
[…] Arte de elegir un puesto para comer… 1 By pfrulas Fue después del relato de “Desayuno en Puesto” que decidí escribir esta nota. Para estar todos en contexto, un grupo de amigos me pidió elegir […]